Cuando partiste' me quedé sentado en el bloque hecho de ladrillos rojos que está junto a la fogata "viéndola"con esa paciencia infinita de siempre; esa' de cuando la lumbre absorbe  todos los pensares... Mi cuerpo estaba inclinado hacia ella y era mis rostro quien le enfrentaba (tengo de testigos a la noche a el tiempo y a los grillos que cantaban nuestra canción, en un recuerdo)

     El silencio había inundado a el mundo. La fogata consumía todo; hasta los pensares... el tiempo también' que se había olvidado de ser el tiempo y vino allí conmigo' para descansar a mi lado ... 
     El corazón mientras callaba y las gotas de fuego hablaban quedamente entre sí. Crepitaban, como una tenue lluvia: suave...

     El calor calentaba mis rodillas, los animales de la noche se acercaban discretamente;  vino un coyote: me vio y sus ojos se atraparon con los mios...
Las sombras de las llamas del fuego' bailaban en mi tibia cara: Y en el, lo peinaban...

     El oro y los horrores en su cabello habían tomado de las manos a las sombras de el fuego reciamente... Se hicieron las parejas y unas pocas orgías comenzaban a consumirse en su pelaje "los sorprendí mirando" El se adornaba...
"Acicalándose" pensaba el miedo, los cabellos se erizaban...
El fuego se consumía lentamente, como si quisiera ser eterno...
Agonizaba; e el tiempo lo miraba y podia sentir como el se ahogaba.

Un palo seco (Otrora juventud) cayó a el fuego y comenzó a incinerarse. Una lluvia de llamas se abandonó en el viento' esparciéndose  felizmente y gritando allá donde caía la luz.

¿Se habrá ido pensando en mi?... ¿que impresión le habré causado?...